Las mujeres como intérpretes

   
         
   
Actualmente hay muchos más jóvenes que en el pasado tocando instrumentos en grupos de música en las escuelas, en orquestas, en bandas o en grupos de pop y rock. Quizá tu o tus amigos tocan algún instrumento. La próxima vez que asistas a un concierto, tanto si tu mismo tocas o cantas como si eres parte del público, haz esta prueba: cuenta cuántos chicos y cuántas chicas están tocando y observa qué instrumento toca cada uno. ¿Crees que habrá el mismo número de chicos que de chicas y que ambos tocarán los mismos instrumentos?

En nuestros días la gente se sorprende menos viendo a las chicas tocar el saxofón, el bajo eléctrico o la batería, y no resulta difícil encontrar grupos formados solamente por mujeres en las listas de éxitos. Pero no ha sido siempre así. Incluso en la actualidad, hay más hombres que mujeres en las orquestas sinfónicas más importantes, y las directoras de orquesta se cuentan con los dedos de las manos. ¿Cuál es la razón? No hay una única respuesta, pero seguramente no tiene nada que ver con las aptitudes de las mujeres para la música.

Durante cientos de años se ha disuadido a las mujeres de tocar ciertos instrumentos ya que se consideraba que éstas eran demasiado débiles o que resultaba antiestético. Todavía en 1930 la BBC rechazaba a las violonchelistas. Según el compositor Ethel Smith, esto se debía a que la postura que debían adoptar al sentarse resultaba indecorosa para las mujeres.